La lengua castellana es de las más ricas en el léxico. Por ejemplo, el condicional en castellano se usa para expresar hipótesis.

Lo que podría ser y nunca fue. El famoso y si…

Yo no sé la cantidad de puntos que ha perdido el Hércules, en los minutos finales de los partidos. 14 dicen algunos resabiados, que llevan las cuentas. Yo no lo sé, lo que sí sé, es que son más perdidos, que ganados en esos fatídicos minutos. Números que dicen que al final de temporada se igualan en la mayoría de ocasiones. Ojalá, pero creo que no lo verán mis ojos.

Tengo mi teoría y es que el equipo está pagando la juventud de sus jugadores y el ser nuevo en la categoría y en contraposición con equipos más curtidos, más bragados, con más cuajo y poso, es el peaje que toca pagar en esta primera temporada en primera RFEF.

El condicional también se usa para expresar deseos.

No conozco a ni un solo socio o aficionado al equipo blanquiazul, al que no le encantaría que el equipo se hubiera reforzado como tocaba en el pasado mercado de invierno, con jugadores que hubieran dado un salto de competitividad y completado una plantilla un tanto corta en número y en calidad. Pero desde las altas esferas no lo consideraron oportuno, por mucho que se les llenara la boca por activa o por pasiva, diciendo todo lo contrario. 

La última acepción por la que se usa el condicional en la lengua de Cervantes es para expresar recomendaciones, con mayor inversión cabría estar en puestos de ascenso directo o como poco en play off al fútbol profesional y créame el lector que por mucha prisa que dicen que tienen, los hechos les delatan y no sabría decir el porqué de tales afirmaciones, cuando una y otra vez ellos mismos se dejan en evidencia.

En esta era digital, en la que tenemos acceso a múltiples datos, a través de bases de datos (big data) y a visionar multitud de imagenes de todos los partidos, Podemos centrarnos en el maravilloso y si… y si… Siendo circunstancias que finalmente no se dieron, tenemos que vivir en una realidad un tanto caprichosa y dejar de lado el matrix paralelo.

De este modo nos irá mejor, si vivimos el dia a dia y nos olvidamos de lo que pudo haber sido yo no fue. Vivamos la realidad.

El fútbol es como es y no como nos gustaría que fuese.

Y es que como decía un entrenador italiano bastante conocido, y si mi abuela tuviera dos ruedas, sería una moto.

Sería mejor ir jornada a jornada y dejarnos de condicionales, centrándonos en el presente.