La terquedad y el necesario plan B

Fluyen las aguas revueltas en la sede sita en Romeu Zarandieta. 

Ni el más acérrimo defensor del entrenador, sale a defenderlo ante la opinión pública.

Corren malos tiempos para su figura y máxime cuando se obceca en cometer los mismos errores una y otra vez de manera reiterada con el mismo patrón, normalmente jugando como foráneo y teniendo su talón de Aquiles en los cambios, que nunca suelen ser determinantes en la resolución de los partidos, por la tardanza en efectuar los mismos.

El crédito que parecía ilimitado allá por el mes de septiembre, lleva varias semanas agotado. La confianza en el entrenador se ha resquebrajado, hasta el punto de pedir su dimisión en los casos más radicales o en solicitar que cambie la forma de juego sobre todo fuera del Rico Pérez, donde el equipo no acaba de funcionar y se hace microscópico, reiterando los mismos errores, por culpa de la terquedad del máximo responsable a la hora de alinear a los jugadores en un sistema de juego rígido que jamás cambia.

Llegados a este punto, filosofemos; Para que las cosas cambien, tienes que realizar cosas diferentes. Si siempre haces lo mismo, el resultado será igual o parecido.

No puedes pretender algo distinto, si nunca cambias. Es ilógico, además de imposible.

Una vez te conocen, se te ven las costuras y tus homónimos de los equipos rivales, saben cómo plantearte los encuentros, porqué has demostrado, no tener un plan B. Siempre la misma táctica, cambiando únicamente de jugadores.

Tiene que haber un cataclismo, para que alteres tus ideas y haya una lucha denodada entre lo que piensas y lo que pones en juego.

En alguna ocasión has cambiado el sistema de juego, compitiendo con 2 delanteros, en el minuto 88 de juego. Es lamentable, además de inconsistente conocer porque lo haces tan tardío, sabiendo que no tendrás trascendencia alguna en el juego y el resultado.

Es como el estudiante, que lo deja todo para el final, siempre obtendrá el mismo resultado. No puede esperar otra cosa, si siempre lo deja para última hora. No cambiando jamás la rutina.

Desde este humilde columnista, se le demanda encarecidamente, que sea valiente y juegue un poco más «alegre» como visitante, pudiendo de esa manera comprobar la plantilla tan potente que se comenta que el Hércules posee en los mentideros futbolísticos. 

No pierda una oportunidad histórica de poder retornar al fútbol profesional, mediante el acceso a los play-off, para los cuales comprobamos que el equipo está más que capacitado para clasificarse, dada la igualdad existente en el grupo. Viendo que, a pesar de todo, estas más cerca de arriba que de abajo.

Todas estas reflexiones, son por tu bien, ya que el del puro, tiene la mecha corta y en cualquier momento…