Cualquier tiempo pasado fue mejor
Esta semana recordábamos que hacía 14 años que el Hércules asaltaba el Camp Nou por cero goles a dos, con doblete del paraguayo Valdez, concretamente fue un 11 de septiembre del 2010.
Fue una de las últimas grandes hazañas del club hasta este último ascenso.
Más de una decena de años de decepciones, sinsabores y fracasos sin parangón han acompañado a la entidad en este periplo, con la culminación del descenso a 2ª RFEF. Con ello se tocó fondo.
Se encendieron todas las alarmas en afición, entidad y por supuesto en todos los actores que forman parte del conglomerado deportivo de la ciudad (políticos, consejo de administración, socios y patrocinadores).
La sociedad más bajo no podía caer.
La espoleta la prendió la afición buscando culpables dentro del consejo de administración, encontrando a Enrique Ortiz como diana de una situación en la que años atrás era impensable que esto ocurriera.
El Hércules, el club deportivo más grande de la provincia de Alicante, con permiso claro está del Elche CF, al que en nuestra niñez y adolescencia recordábamos en el fútbol profesional, concretamente en 1ª y 2 ª división, se había sumido en una serie de decisiones deportivas y económicas claramente discutibles (todas ellas bajo el yugo del dueño del club) que hizo que encadenara varios descensos consecutivos, con el consiguiente perjuicio tanto económico como reputacional.
A la vez que bajaba de categoría, perdía aficionados y socios a una velocidad de vértigo.
Todo aquello es historia negra del club. parece que aquellas nubes negras con grandes tormentas se han disipado y que comienza a salir un sol radiante, gracias a la nueva política deportiva, que aúna estabilidad en el banquillo y que hace que trabajen de la mano y de manera coordinada, la dirección deportiva y el entrenador (con gran experiencia en este tipo de categorías) en mercados de fichajes. Esto ha hecho que la afición retorne al vetusto y antiguo estadio José Rico Pérez, recinto que necesita a gritos una remodelación integra (pero eso lo dejaremos para otro artículo más adelante).
Más de 11.000 socios en esta temporada en la tercera categoría del fútbol español, hace que se puedan contemplar grandes entradas cada 15 días en el templo blanquiazul.
En Alicante hay ganas de fútbol y ganas del retorno al fútbol profesional. Se desea dejar en el «olvido» a los héroes que anteceden al título de este artículo. Dejar en el recuerdo a jugadores como Valdez, Trezeguet, Drenthe o Pamarot…y que estos sean sustituidos por jugadores de esta época, como Abad, Alvarito, Roger o Aranda. Dejando a los de aquella temporada en leyendas del club y teniendo que tirar de hemeroteca para recordar tales efemérides.
A día de hoy, no sólo se ve al Hércules de Alicante con esa mirada de grande venido a menos en la ciudad o en la provincia, sino también en todas y cada una de las ciudades que visitamos cada dos jornadas.
Todos quieren ganar a ese Hércules que nos retrotrae a una infancia feliz y dicharachera, que ya hace mucho tiempo que tarda en volver y que estamos esperando su retorno con inquietud y casi con desesperación.
Esperamos que los tiempos actuales traigan gratas alegrías y podamos disfrutar del regreso a los cielos. La ciudad, la afición y el equipo lo merecen. Optimismo no falta.
