Soy español, ¿A qué quieres que te gane?

Si alguien ha hecho más por la unión del país en el que habitamos y poseemos la nacionalidad, no han sido los políticos, que ellos en lo único que piensan es en llenar sus bolsillos a costa del contribuyente con la cantidad ingente de impuestos y medidas fiscales que ahogan las economías familiares, sino más bien la selección española de fútbol dirigida y capitaneada por D. Luis De la Fuente, que ha hecho que todos y cada uno nos sentimos orgullosos de ser compatriotas patrios de un grupo de futbolistas que han realizado una Euro excelsa, con un juego vistoso, entretenido y de quilates, con unos resultados lejos de ser imaginados antes de empezar la competición.

Personalmente no me sorprendió la cantidad ingente de público que acudió el día de la celebración a Madrid, pero si la corta edad de los mismos y la procedencia de cada uno de ellos.

 Muchísima gente joven se dió cita a lo largo de todo el recorrido y de cantidad de lugares de la geografía española. Valga decir que es el primer gran título de una generación (Nations League aparte) coetánea de gente como Lamine o Nico.

 El ejemplo claro lo tengo en casa, niña y niño de 11 y 13 años, que disfrutaron en la celebración de Luceros, con todo tipo de cánticos hasta las horas de la madrugada, mientras me mantenía en segundo plano (nos hacemos mayores)

Gracias al gran trabajo que se lleva décadas realizando en la cantera, con la coordinación de la RFEF, se ha conseguido el primero de los frutos. Pero demos por seguro, que el árbol seguirá creciendo y dando una mayor cantidad de ellos. Pero para conseguirlo, deberemos apoyar como se ha hecho en este campeonato, a los jugadores y al seleccionador, gran conocedor del trabajo de las inferiores, ya que ha pasado por todas las secciones del escalafón, cuando las circunstancias no vengan bien dadas, que estoy seguro que vendrán. Ya que esto es deporte y es complejo.

El panorama y el futuro que tenemos ante nuestros ojos es muy halagüeño. Faltará cómo en todo gran campeonato tener esa dosis de suerte para que en el momento preciso caiga de tu lado y no hacia el otro. 

Y este campeonato recién finalizado no ha sido una excepción. A grosso modo recuerdo una mano dentro del área, un palo, un offside milimétrico y por encima de todo el VAR.

Mientras tanto, podremos decir que hemos vuelto a ser campeones, una vez más.

Soy español, ¿A qué quieres que te gane?